El pelo es una parte grande de mi vida. Naturalmente, deseo que no sólo sea humedecido, pero velloso, el vegetariano, largo y fragante. Para encontrar un champú que este acomodar puede ser bastante la tarea, como es hecho más probando sustancias químicas duras en animales, u ostenta una etiqueta colorada que no puede ser retrocedida con un producto igualmente impresionante. Para toda mi conducta inconstante, yo giro al champú de la marca de Costco. ¿Por qué algo tan barato? Porque dura mí mucho tiempo, entra una botella conveniente de bomba, y tiene una fórmula sencilla que no engrasa arriba el pelo. No se jacta promesas falsas de cerraduras la consistencia de acero (tos Garnier. ..you chupa), pero permite simplemente el pelo para mantener una textura todo su propio. Y usted consigue una TONELADA de champú para básicamente no dinero.

Zapatos

Los zapatos son impresionantes. Trato de llevar zapatos casi cada día, pero muchas veces yo acabo por quitarlos en algún punto. Cuando permisible, yo a menudo llevo calcetines con mis zapatos, a menos que por supuesto lleve sandalias o tacones (en cuál caso que llevaría malla). Algunos de mis personas predilectas de zapatos encuentran ser "hipster," que es no sólo absurdo pero algo grosero. Y seamos honesto, un cierto maestro inglés anónimo lleva zapatos semejantes a la imagen conectada. Si hace las matemáticas, él es mucho más hipster según elección de zapato que cualquiera yo conozco.

Me choca cuando...

En un mundo llena de a personas despreciables, objetos, conceptos, emociones y situaciones, puede ser difícil de encontrar el que usted odia el más. Yo, para uno, odio muchisimas cosas. Las personas que creen son superior o tienen el derecho de ganar un enfrentamiento cuando su lógica es estropeada. Yo también odio polvo y tierra. Odio mi perro, y el hecho que excrementa en mi suelo. Odio choques de cafeína, y yo odio cuando Zamora me coge jugando Alas Diminutas en mi teléfono. Odio probar estandarizado por la tarde u horas de noche, y asimismo yo odio preparación estandarizada de prueba. Odio pesimistas que auto aborrecendo, quien cuando trata de dar el consejo a, inmediatamente lo niega y concluye que se sentirían más bien miserable que se olvida. Odio col rizada sin sabor. Odio chocolate con leche, en su mayor parte Hershey. Odio algo mi clase de la Historia de EEUU, y yo odio correr la milla.

Ahora que he tenido la oportunidad de expresar mi odio para cosas aparentemente arbitrarias y triviales, yo le dejo con lo que odio el más: esperando.